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Edam es una pequeña ciudad ubicada en la provincia de Holanda Septentrional. Su proximidad a Amsterdam la hacen ideal para visitarla, junto a otros pueblos con encanto de la región del Waterland, como son Volendam y Marken.
Su fama internacional se debe al afamado queso que se produce aquí desde hace siglos, pero la pequeña población se puede enorgullecer de ofrecer al visitante un casco antiguo delicioso, con canales y terrazas, puentes colgantes e iglesias y casas con fachadas de madera que forman parte de la lista de monumentos nacionales de Holanda.
Os invitamos a visitar esta maravillosa ciudad y por supuesto a probar alguna de las variedades de los quesos Edam.
Dónde está Edam
La ciudad está a poco más de 20 Km al norte de Amsterdam. Cómo os decíamos esta a una distancia ideal para hacer una escapada desde la ciudad de los canales.
Para llegar, no os podréis valer del tren ya que no hay estación, pero si que lo podéis hacer en bus desde la estación central de Amsterdam. Podéis subir en los autocares de las líneas 310, 312 y 314 dirección Hoorn o los de las líneas 316 y 318.
En coche sólo hay que coger desde la A1, la carretera S116 hacia el norte.
Excursión a Edam y Zaanse Schans desde Amsterdam
Si no tenéis coche o no queréis liaros con el transporte público, que por cierto es bastante caro, podéis reservar la excursión a Edam y los molinos de Zaanse Schans en español.
Apuntes históricos
Fue fundada en el s. XII. Hasta el siglo XVI su desarrollo económico venía dado por la potente industria naviera, lo que la convirtió en uno de los puertos más importantes del norte de Holanda, junto a Amsterdam, Hoorn y Enkhuizen. La introducción de esclusas para evitar las frecuentes inundaciones generó más seguridad a la población pero paradójicamente contribuyó a la sedimentación del puerto y supuso el declive de la actividad portuaria como motor de la ciudad.
Afortunadamente para la ciudad, el florecimiento de la industria del queso en el s.XVI, contribuyó a mantener la riqueza de la ciudad. El genuino queso de Edam se vio beneficiado por diversas medidas, entre las que destacaba la concesión real para celebrar un mercado semanal, tradición que se mantuvo hasta bien entrado el s.XX.
Qué ver en Edam
Nuestra visita a Edam fue una tarde de agosto. A partir de las 18h ya no hay casi nadie paseando por esta encantadora ciudad. Además el parquing ya era gratuito, así que matamos dos pájaros de un tiro.
Nada más aparcar ya podréis cruzar por un bonito puente colgante blanco tan típico de Holanda. Un canal y las primeras barcas serán la preciosa tarjeta de presentación de la ciudad.
Más adelante y en pocos minutos llegaréis a la Damplein, la plaza principal y centro del casco histórico de la ciudad. La verdad es que es un lugar muy curioso, porque la plaza parece más bien el tejado de una casa que una plaza al uso. Cuando estéis encima lo entenderéis, pero lo mejor es que a un lado tendréis una preciosa panorámica con el ayuntamiento a la izquierda y el museo Artimare a la derecha.
El ayuntamiento de Edam se construyó en 1737 y tiene una bonita torre de madera que queda perfectamente en la foto con la otra torre que posee el edificio neo-renacentista que alberga el museo Artimare.
Al otro lado podréis admirar preciosas casas con fachadas de ladrillo, al más puro estilo holandés. También algunas tiendas de souvenirs y cómo no, tiendas de quesos de bola Edam, con su característico color amarillo.
Queso Edam
Vuestra siguiente parada tendría que ser la plaza dónde se celebra el tradicional mercado de quesos de Edam. Aunque cuando fuimos nosotros estaba vacía, pudimos por el contrario, admirar la belleza de sus edificios y de la estatua en homenaje a los porteadores de los quesos.
Si estáis interesados en el folclore de la venta de los quesos, estáis de enhorabuena, ya que desde 1989 se ha retomado esta tradición para que los turistas puedan ver como se hacía en el pasado. Dicha representación tiene lugar los miércoles a las 10:30 durante julio y agosto.
Luego os recomendamos que sigáis el curso del canal, para en un precioso paseo de cinco minutos, llegar hasta la Iglesia de San Nicolás, también conocida como Grote Kerk. Se trata de un impresionante edificio de ladrillo rojo, construido en el s.XV y que tiene la particularidad que está edificada sobre pilotes.
Si volvemos sobre nuestros pasos, os sugerimos que al llegar la plaza del mercado del queso, giréis hacia la derecha y os adentréis en el barrio dónde está situada la iglesia de la Virgen María. Aunque fue reconstruida durante el siglo pasado, su torre data del s.XV y es de estilo gótico tardío. Los habitantes de la ciudad la conocen como el carrillón (Speeltoren).
No os lo penséis más, Edam no es sólo un lugar famoso en el mundo por sus quesos, sino un lugar idílico para pasear y para tomar algo en alguna de sus animadas terrazas.
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