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Cala Montgó es una de esas playas que siempre apetece visitar y es que a pesar de que está un poco masificada y con bastantes edificios en uno de sus flancos, sus cristalinas aguas, su dorada arena y su relajada entrada al mar, provoca que muchas familias quieran disfrutar de este privilegiado rincón de la Costa Brava.
Cómo llegar a Cala Montgó
Conviene aclarar que la cala pertenece al término municipal de Torroella de Montgrí, aunque dada la cercanía al núcleo urbano de L'Escala, casi todo el mundo la considera una playa de este último municipio. Si miráis en las webs de ambos pueblos, Cala Montgó aparece como una de sus playas.
En cualquier caso se puede decir que está en el límite de ambos territorios y para llegar a ella lo más fácil es acceder desde L'Escala por la autopista AP-7, salida 5 y continuar por la carretera comarcal GI-623 hasta L'Escala. Una vez en el pueblo hay diferentes señalizaciones que os conducirán a Cala Montgó pasando por el conocido camping de Cala Montgó y otras infraestructuras turísticas.
Cala Montgó tiene varios parkings antes de llegar a la misma cala, aunque como casi en todos lados, en temporada alta se llenan rápido.
Cala Montgó
A pesar de ser una cala, con una característica forma redondeada, es bastante grande y con una buena capacidad, gracias a su casi medio kilómetro de largo por 200 m de ancho.
Cómo os decíamos es una playa con bandera azul gracias a la calidad de sus aguas que destacan por ser cristalinas. Al contrario que en otras playas y calas de la Costa Brava, es de arena dorada, ideal para los más comodones y para poder jugar a raquetas u otros deportes de pelota.
Además tiene una entrada al agua bastante relajada, sin hundirte de golpe como pasa en otros lugares del litoral norte catalán, así pues es ideal para ir con niños pequeños.
La playa tiene todo tipo de servicios, ya que sus 430 metros de longitud están delimitados por un paseo marítimo con varios restaurantes y terrazas.
Además hay socorrista, aseos, alquiler de tumbonas y sobre todo alquiler de kayaks y tables de paddle surf para poder disfrutar de un día genial de playa.
Los más activos disfrutarán con los caminos de ronda que parten de ambos flancos de la cala. Estos senderos que discurren por el litoral de la Costa Brava nos llevan hacia L'Estartit en dirección sur y hacia L'Escala y la Torre de Montgó en dirección norte.
La Torre de Montgó es una torre de defensa del año 1598 que se utilizaba para proteger a los pescadores de los ataques de naves piratas que asolaron esta zona en los siglos XVI y XVII siendo el más famoso, el temido pirata Barbarroja.
Actualmente es un Bien Cultural de Interés Nacional y desde él se obtienen grandes panorámicas de L'Escala, de Sant Martí d'Empúries y de la bahía de Roses.
Estos paseos por la tarde son de una belleza inusitada, cuando la luz a estas horas ilumina el mar mientras lo admiramos cruzando el paisaje típico de la Costa Brava compuesto por pinos y acantilados.
Qué hacer en los alrededores
Esta zona de la Costa Brava está plagada de sitios para visitar: pueblos medievales, playas de ensueño, calas recónditas. Sin duda L'Escala es el núcleo poblacional más cercano. La capital de la anchoa ofrece muchos lugares para alojarse y un delicioso paseo hasta las ruinas d'Empúries, un lugar dónde retroceder a la época de griegos y romanos, que entraron en la península por estos lares.
El paseo continúa un par de kilómetros más hasta Sant Martí d'Empúries, un encantador pueblo muy pequeño con una iglesia preciosa rodeada de terrazas y restaurantes y unas playas de ensueño.
Otra atracción natural que no os podéis perder y que está muy cerca son las Islas Medas y aunque no se puede poner un pie en ellas por ser un hábitat natural protegido, si que podéis rodearlas en kayak o bien en una tabla de paddle surf, actividades que os encantarán por poder disfrutar de un entorno natural único.
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