Tabla de contenidos
Llega el Adviento y Europa se llena de luces, adornos y de sus famosos mercadillos de Navidad. Las semanas previas a estas fechas tan señaladas son muy celebradas en multiutd de países europeos, especialmente en Alemania y Austria. Prácticamente cada ciudad o cada pueblo tiene su mercado de Navidad. Generalmente se ubican en el casco antiguo y están compuestos por varias casetas de madera donde se pueden adquirir originales adornos navideños, árboles de Navidad, belenes, luces, dulces tradicionales, comida típica y como no el Glühwein, el famoso vino caliente que reconforta el cuerpo de los turistas europeos, que como nosotros, deciden pasar unos días envueltos de ambiente navideño en una ciudad diferente a la nuestra.
Es una experiencia única viajar unos días o tan solo un fin de semana a algún mercadillo de Navidad. Si las condiciones lo permiten, intentamos visitar uno diferente cada año. Y es que nos cautiva la manera tan especial y diferente que en estos países tienen de celebrar esta época, tan importante para nosotros. Una forma, totalmente diferente a España. En los países mediterráneos, no vivimos el Adviento de ninguna manera y los días previos sólo nos dedicamos a lanzarnos a arrasar en los centros comerciales, en cambio nuestros vecinos del norte disfrutan estos días en la calle con amigos, familia o compañeros de trabajo. No se aprecía un espíritu tan consumista como en España.
Mercados hay para todos los gustos y necesidades. Podemos encontrar en las grandes ciudades en las que normalmente están diseminados por diversos lugares emblemáticos. Ejemplo de ellos son los famosos mercados de navidad de Nuremberg, Colonia y Colmar. Estas urbes se vuelcan con la celebración del Adviento y proponen al visitante diferentes tipos de mercado, que van desde los más clásicos hasta los más bohemios o artísticos, pasando por otras temáticas como la medieval o la dedicada a los niños.
Los pueblos pequeños, no obstante, no se quedan atrás y también organizan sus propios mercadillos navideños. Generalmente su entorno es espectacular, bien por su situación natural o bien por la belleza de su casco antiguo, normalmente medieval; así localidades como Mariazell, Rothenburg ob der Tauber o St.Wolfgang festejan estos días su mercado y organizan multitud de actividades que otorgan a la población un verdadero ambiente tradicional y navideño.
Otros mercados se celebran en plena montaña como el mercadillo navideño de Gosau (bergweihnachtsmarkt), en Austria, o el mercado de Navidad de Hungerburg a 858 m de altitud rodeado de nieve y con la ciudad de Innsbruck a tus pies.
Visitar estos tradicionales mercados también puede ser una fantástica actividad familiar. Para los niños es una aventura viajar en otoño-invierno equipados con sus guantes, gorros y bufandas, pero es que además todos los lugares dónde se celebran mercados de navidad tienen muy presente a los más pequeños de la casa y organizan multitud de actividades para ellos, desde carruseles y tiovivos, talleres de creación de galletas, velas o adornos navideños, teatro, marionetas, cuentos, visitas a Santa Claus, pistas de patinaje y un largo etcetera que hace que la magia de la Navidad también esté presente en ellos.
Si vais con niños os recomendamos Montreux, junto al lago Leman, en Suiza. Es un paraíso para los niños ya que además de su precioso mercado que se asienta en el paseo frente al lago, hay otras actividades que hacer. Nosotros aprovechamos nuestro viaje para ir a hacerle una visita a Santa Claus, en su casa de Rochers de Naye, en una montaña de 2.052 m de altitud y a la que se accede con un tren desde Montreux. El entorno es inigualable, todo cubierto de nieve y con un panorama alpino soberbio. Santa Claus nos esperaba al final del un lago pasillo lleno de luces y color, dedicándonos en privado unos minutos de su tiempo. La siguiente parada, fue el Pueblo de la Navidad, donde la Navidad y los niños son los protagonistas. Este lugar, emplazado en una preciosa terraza que da al lago Lemán y con Montreux a tus pies, es el escenario de actividades destinadas a los más pequeños. Os aseguramos que viviréis momentos inolvidables, tanto para vuestros hijos, como para vosotros.
¿No estás cansado de viajar siempre en verano, con las sandalias, los shorts y la calor?, pues atrévete en invierno, vive una época mágica en muchos rincones de Europa (para muchos desconocidos) y que no aparecen ni tan siquiera en las guías. Disfruta de unos días, o simplemente de un fin de semana, oyendo villancicos al aire libre, déjandote seducir por el delicioso olor a pan de jenjibre o a salchichas. Contempla maravillado la bella iluminación de sus casas con entramados de madera y gigantes árboles de Navidad. Siente la auténtica Navidad. Nuestros destinos para diciembre 2012... Frankfurt y Carcassone. Ya os explicaremos a la vuelta.
No te puedo recomendar nada de Frankfurt porque no he estado… pero Carcassonne os va a encantar! Si tenéis tiempo libre, id a hacer cata de vinos al Chateau Auzias, porque están riquísimos y el lugar es muy bonito ;)
Por cierto, los mercados de navidad de Viena son un pasada también y estoy segura de que a los peques les encantarían… así que ya sabéis para el año que viene.
Un abrazo
Si, en Carcassonne ya hemos estado varias veces pero nunca en su Mercado de Navidad, a ver qué tal? no será como en Alemania, pero al menos está cerca… :D
y si Viena y otros lugares de Austria en Navidades son mágicos…
Un abrazo
Pues es una cosa que me encantaría hacer, conocer alguna ciudad centroeuropea en Navidad. Por lo que se ve, la Navidad se vive de una forma especial…
Me apunto el de Montreux a ver si algún año cae y puedo ir con mis sobrinos.
Un saludo ;)
Pues Helena, no te lo pienses. Es simplemente entrañable, vayas con amigos, pareja o niños, y tienes un montón de sitios dónde elegir y así poder aprovechar tarifas baratas. Cuando te decidas avísame y te ayudo a elegir destino… :D
sludos